Pese a que todas las quinielas así apostaban por ello. Pero, ¿qué ha pasado?
La Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas sigue dando palos de ciego, y ahora le ha tocado a Margot Robbie. La actriz australiana no alcanza los votos necesarios para enfrentarse a Danielle Brooks
(‘El color púrpura’), Da’Vine Joy Randolph (‘Los que se quedan’), Emily Blunt (‘Oppenheimer’), Jodie Foster (‘Nyad’) o su compi en la cinta de Greta Gerwig, America Ferrara.
Un jarro de agua fría que ha escandalizado a las redes sociales y a Ryan Gosling (el Ken de Margot), que sigue sin entender el porqué de semejante afrenta contra una nominación casi cantada. Una decepción (pese a su nominación como Mejor Actor de Reparto) que supera cualquier tipo de excusa por parte de la Academia para no incluir a una de las actrices estrella de 2023, encargada de regalarnos una de las interpretaciones más complejas y apasionadas, pero populares.
Quizá, haya sido por esto último por lo que el jurado elector no haya sido capaz de ver más allá de un gran éxito de taquilla, y haya querido «castigar» o frenar su éxito. Una decisión que, como decíamos, ha entristecido a Gosling, pues «no hay película de Barbie sin Greta Gerwig y Margot Robbie, las dos personas más responsables de esta película que ha hecho historia y que ha sido celebrada en todo el mundo», en sus propias palabras.
Porque sí, si Robbie no ha obtenido el favor del jurado, tampoco lo ha hecho la directora de la cinta más rosa chicle del pasado año, todo un alegato femenino (para todos los públicos) a favor de la igualdad entre hombres y mujeres, a favor de aquellas personas que, en un momento de sus vidas deciden autodescubrirse para rebelarse contra sus conflictos internos, el triunfo del pink power en su versión más plástica, un revulsivo que Hollywood no termina de tragar para evitar que le acusen de excesiva entrega por lo mainstream. ¡Qué tontería! Menos prejucios, más gente como Barbie, Margot y Greta. Ryan, ¡qué tío más elegante!