Si la vuelta a la normalidad y el apagado de luces te ha sumido en una tristeza tal, que te cuesta hasta abrir la boca para darle el último bocado a ese roscón de Reyes, que te ha salido tan rico, andas bajo de serotonina. ¿Qué necesitas? Un buen chute de magnesio.
Y es que son muchos los estudios que avalan la relación entre entre esos estados de ánimo negativos, que no te dejan en paz, y el mineral en cuestión. Así, la ingesta diaria de magnesio supondría un blindaje contra esa ansiedad e irritabilidad que te pondrían en jaque, casi mate, al ser capaz de ayudarte a regular la actividad de neurotransmisores como la serotonina, tan protagonistas a la hora de mantener tu equilibrio emocional.
Si a este chute, tan necesario, de magnesio, le añades deporte semanal y una visita al psicólogo (si es que la situación se te va de madre y pierdes las riendas del día a día), la partida la tienes más que ganada. Venga, ¡ánimo, que tú puedes!
Foto portada: PXLR AI-generated image
Texto: Bru Romero