Las quedadas con amigos, los encuentros con la familia y la Navidad, que despierta nuestro afán por compartir buenos momentos y celebrar, han llegado para quedarse unas cuantas semanas, y nosotros no podemos por más que planear hasta la extenuación, porque nos apetece.
Te proponemos una lista de planes, sugerencias o regalos que pedir a quien te los traiga para que aproveches, exprimas y disfrutes al máximo de este diciembre y despidas el año como se merece.
Grand Hyatt Barcelona
Para celebrar su primera última noche del año por todo lo alto, el hotel catalán propone un menú de 7 platos con maridaje, que no te deberías saltar. Una oportunidad perfecta para zambullirte en una experiencia sin igual, en el restaurante Sofía Bar&Tapas, amenizada por esos duetos musicales que marcan la diferencia, capaz de convertir la cena de Nochevieja en un espectáculo digno de ver. Después del cotillón y las campanadas podrás seguir en Zuu, su apetecible night club.
W Barcelona
Inspirados por la magia de la ópera, el hotel diseñado por Ricardo Bofill despide el año con 'YOU MADE OUR NYE LIST', su particular propuesta gastro, con la que pretenden dejarnos a todos rabiando de gusto. Una cuidadosa combinación de sabores que entre su cangrejo real sobre suave brioche, suquet de langostino fusionado con mango y huevas de tobiko, carpaccio de gambas de Palamós y carabinero o su espectacular carrillera de Wagyu se juegan sus bazas para convertirse en imbatibles.
Patio de Leones
Con la jarana corriendo por las venas y lunares en el alma, no dejamos de celebrar los buenos ratos que nos tiene preparados el año, así nos sentamos a la mesa de este Patio de Leones con vistas a la madrileña Puerta de Alcalá donde tradición y desparpajo van de la mano. Punto de encuentro para fanáticos de las buenas tapas (y del mejor producto) y ese cañeo bueno, que levanta cualquier día gris o melancolías de este tiempo festivo. Un lugar donde el jaleo no se interrumpe y que para estas fechas tan señaladas nos propone un menú navideño donde entre salpicón de langostinos, tartar de salmón, paté de ave de corral y castañas glaseadas, bacalao sobre crema de coliflor y una presa ibérica, que quita el sentío', brindaremos por lo bueno que está por llegar.
CentOnze
El restaurante del hotel Le Meridien Barcelona, en plenas Las Ramblas, se complace en compartir con nosotros una maravillosa cena de Nochevieja no apta para aburridos, y nosotros caemos rendidos ante lo que está por llegar. Los macaroons de albahaca y tomate con mousse de queso, el carpaccio de cigala e higos y el atún rojo con esencia de gamba y salsa chili casera o el solomillo a la brasa con arroz meloso de montaña tienen la culpa, y qué culpa más buena. Si tampoco tienes plan para Navidad, pregunta porque siempre habrá hueco para ti (y tu acompañante).
Epílogo
Su reciente (y primerísima) estrella Michelin ha provocado que el restaurante de Rubén Sánchez-Camacho se haya convertido en uno de los hot tickets del momento. Por ello, aunque está completo para Nochevieja, nos chivan que aún se puede reservar para comer en Nochebuena, ¿cómo te quedas? Buena excusa para dejarnos caer por La Mancha y disfrutar, en Tomelloso, de su cereza de asadillo, el buñuelo de sopa de ajo, la magistral croqueta, la caballa en demi-glace y una siesta de cuidado. El paraíso debe ser eso.
Pulitzer Barcelona
The Greenhouse, el restaurante insignia de este coqueto hotel, se pone manos a la obra para que tu idea de celebrar la Navidad fuera de casa esté a la altura de lo que toda la familia espera. Así, platos como su yema de huevo crujiente con setas y jamón ibérico, la escudella con galets y pilota y cualquiera de sus opciones de segundo a elegir (besugo elaborado en dos cocciones con cebolla en texturas o lingote de cerdo especiado acompañado de chutney de piña y cremoso de tubérculo) se convierten en otra oportunidad ganada para seguir bebiendo burbujas.
The Barcelona Edition
Una vuelta a las tradiciones culinarias catalanas es lo que propone el restaurante Veraz para sus celebraciones de Nochebuena, Navidad y San Esteban. Una oportunidad más que espléndida para darte un homenaje gastronómico en compañía de los tuyos, mientras su carpaccio de lubina con puerros, su sopa de galets y el cordero braseado con cigala a la plancha, de la comida de Navidad, se baten a duelo con las gambas plancha, las croquetas de setas y los canelones de pollo asado con trufa de San Esteban. Cualquier bando nos vale.
Si la celebración te la montas en casa no puede faltarte...
Dehesa Monteros
Directitos de la Serranía de Ronda y con la solera que dan 20 años de guarros, bellotas y una premontanera de castañas, que no se puede aguantar, Chelo Gámez (catedrática de Macroeconomía en la Universidad de Málaga, del cerdo Rubio Dorado, tan típico del Valle del Genal, y de la vida en general) hace posible que su sueño siga creciendo y nuestro paladar disfrutando de la pureza y sabor de un jamón 100% ibérico, a la altura de esas otras ganaderías que copan la primera línea de las zonas gourmet. Una apuesta ganadora con la que, junto a sus hijos Chelo y Pepe, recupera la riqueza de lo artesanal y el salchichón, la cabeza de lomo o la papada (¡ojito cuidao'!) como secundarios que son protagonistas.
Finca La Torre
En un momento en el que vigilamos hasta la extenuación en qué nos vamos a gastar los cuartos, nos lanzamos a por los aceites de esta almazara malagueña porque valer, valen 'toda' la pena. Un placer absolutamente hedonista con el que mimarse un poco más, mientras nuestro paladar se lo goza con el sabor de este AOVE de producción ecológica y biodinámica. Un aceite de autor tras el que encontramos el buen hacer de Víctor Pérez, ingeniero agrónomo cuyo sueño de sacar el mayor provecho al olivar de su finca propia, le ha permitido llegar a esta Navidad con cuatro aceites de oliva virgen extra monovarietales listos para regalar. ¿Te faltaba algún regalo por comprar? Pues ya lo tienes, DEAR.
Monte La Reina
La bodeguera Carolina Inaraja se las sigue pintando sola para dejarnos al borde de la más frenética de las obsesiones. Así, con su nuevo espumoso (Claudia Moreno, en honor a su sobri), la bodega Monte La Reina llega a tiempo para llenar esas copas que quieren algo diferente y que encuentran en las tierras de Toro la mejor inspiración. Un mitad uva chardonnay, mitad verdejo, que rompe esquemas y consigue aunar en un mismo sorbo el poso de esas viñas centenarias y las burbujas más frescas que las tierras más jóvenes pueden dar. Un caldo que para estas fiestas viene en un estuche con dos posavasos de cerámica (firmado por la madrileña La Barrroteca), y que nos regalarán sin duda algunos de los mejores momentos de la sobremesa.
Si no puedes parar quieto en casa...
Canfranc Estación, a Royal Hideaway Hotel
El Pirineo Aragonés se convierte en la escapada más apetecible para los amantes de la nieve y el fresquibiris y nosotros, que nos apuntamos a un bombardeo, ya tenemos listo el petate para pasar unos días en el Canfranc Estación, a Royal Hideaway Hotel. Un pedazo de la era dorada del ferrocarril de los años 20 convertido en 5 estrellas, y a un tiro de piedra de las estaciones de esquí de Candanchú y de Astún, y del puerto de Somport. Vistas, naturaleza en su máxima expresión y un vagón francés de 1927, que hace las veces de curioso restaurante donde el estrellado Eduardo Salanova y Ana Acín, hacen y deshacen para que puedas degustar los ricos sabores aragoneses de kilómetro 0. Normal que, a principios de siglo, todos quisieran pasar por allí.
Palacio Gran Vía, a Royal Hideaway Hotel
La antigua sede de la banca Rodríguez-Acosta, frente a La Alhambra, recupera su esplendor de antaño gracias a este hotel granadino de 5 estrellas. Un edificio de principios del XX para albergar uno de los artesonados neomudéjar más bellos de la ciudad, así como suelos de teselas, frescos, ornatos modernistas o incluso las cajas fuertes originales del banco. Un bocado de historia que sigue reescribiendo su propia trayectoria en esta Granada abierta al visitante atraído por la Alhambra, los jardines del Generalife y el Albaicín, Patrimonio de la Humanidad y esos palacios nazaríes, ornamentaciones andalusíes y patios, muchos patios, como sacados de cualquier cuento de fantasía. Pasen por El Patio, si quieren sacarle partido al hotel en todo su sabor.
Si quieres pasar por chapa y pintura antes de darte a la fiesta...
Hada Labo Tokyo Men
La firma de cuidados para la piel japonesa tiene el chute revitalizador que necesitas para sobreponerte a cualquier noche de esas en las que pierdes hasta la noción del tiempo. Y es que su crema facial antiarrugas e hidratante es el 3 en 1 que andabas buscando, con la idea de devolverle a tu piel esa suavidad y tersura de tus años mozos. Un gel ligero y de rápida absorción, tanto para el día como para la noche, que actúa como crema, sérum y mascarilla y que, enriquecido con su superácido hialurónico, conseguirá convertirse en tu herramienta necesaria para ofrecer tu mejor versión.
Le Domaine
La mezcla de las labores de estudio, análisis y experimentación del experto en viticultura Pierre-Louis Teissedre y el genetista Nicolas Lévy dan como resultado esta exclusiva marca de cosmética de lujo con fórmulas patentadas que combinan ciencia avanzada y naturaleza, y a la que ni el mismísimo Brad Pitt se ha podido resistir. Y es que una vez que le informaron de las bondades de la tierra de Provenza y de una ciencia innovadora capaz de crear unos activos exclusivos (GSM10™ y ProGR3™) para conseguir una piel más luminosa, descansada, regenerada y flexible, el actor no dudó en involucrarse en el proyecto. Toda una rutina que al ritmo del gel purificante y antioxidante, el sérum efecto rellenador y la crema rejuvenecedora se ha convertido en el 'abc' del guaperas de 'Thelma y Louise', y en su mayor secreto compartido. ¿Nos lo regalamos o se lo pedimos a los Reyes Magos? Que lo busquen en mumona.com, la tienda online de cosmética de autor. 0 excusas.
Si no quieres salir de casa porque eres el Grinch...
Los hombres rotos, de Inma Brea
A través de Nicolás, Zacarías y Miguel, Inma Brea se encarga de realizar una exploración introspectiva y conmovedora de la masculinidad y las luchas emocionales a las que se enfrentan los hombres en la sociedad contemporánea. Historias que hablan de traumas y de batallas internas, que no solo afectan a varones, sino a todos los seres humanos.
Los guapos, de Esther García Llovet
¿Un episodio de 'La dimensión desconocida' ambientado en la turística costa valenciana? ¿Un 'Twin Peaks' castizo? ¿Una de Stephen King en la Albufera? ¿Unos 'Encuentros en la tercera fase' con guiris como extras? Bienvenido al mundo de Esther García Llovet y a esta misteriosa historia ocurrida frente a un camping de El Saler.
Mesa para dos, de Amor Towles
Del celebrado autor de 'Un caballero en Moscú' llegan seis relatos que transcurren en Nueva York, al filo del cambio del milenio, y una novela breve ambientada en la época dorada de Hollywood. Una colección de historias inconexas, seductoras y, según los más entendidos, de lo mejorcito del autor estadounidense.
Gente normal, de Sally Rooney
Ahora que Paul Mescal está en boca de todos (y en los sueños de otros tantos), gracias a su papel de Lucius en 'Gladiator 2', no está nada mal que recuperemos el libro que inspiró la miniserie homónima con la que el irlandés se coló en nuestros corazones de niñato enamoradizo y que no se entiende ni él. Una historia sobre la fascinación mutua entre dos personas que no consiguen encontrarse, y que nos retrotraerá a esos años de insti en los que tratábamos de encontrar nuestro lugar.
Y si te privan las luces, la gente hasta abarrotar, las pistas de hielo y unos churros con chocolate para olvidar lo que tu tarjeta lleva gastado...
Mercadillo navideño de la Plaza de Colón
Organizado por la Asociación de Comerciantes Barrio de Salamanca - Distrito 41 y el Ayuntamiento de Madrid, la cuna del chotis se sitúa al nivel de otras capitales europeas y saca pecho con este mercadillo teñido de espíritu navideño al que no le falta ni una pista de hielo por la que sentirte Javier Fernández. Más de 40 casetas donde encontrar productos artesanales, dulces típicos, decoraciones para el belén o el árbol y hasta turrones, polvorones, vino caliente con pretzels, y los míticos churros de San Ginés, porque no hay Navidad ni Año Nuevo que entre que se precie sin una buena mojadita en su 'cocholate', perdón, chocolate. Me pongo hasta nervioso.