Por eso Burberry, preocupado para que no perdamos nuestra más probada elegancia, se nos adelanta para proveernos de una cantidad de posibles opciones para que sigamos manteniendo el listón bien alto. Una collage de estilos aptos para darlo todo frente al escenario (o detrás de él), y que gracias a la buena dirección del diseñador creativo de la casa, Daniel Lee, nos resuelve esa papeleta ipso facto.
Un estética lo suficientemente ochentera/noventera para que te sea irresistible a la hora de meter todo lo necesario en el petate y poner así rumbo al Tomorrowland (Bélgica), al Sziget Festival (Hungría), al Glastonbury Festival (Reino Unido), al Lollapalooza (Estados Unidos), al Sónar (España), al Primavera Sound (España, Portugal y Latinoamérica) o al Burning Man (Estados Unidos) sin mirar atrás.
Ropa real para gente como tú y como yo, que lo quiere es que no dejar de disfrutar mientras su banda favorita revienta sus tímpanos y les da la mejor excusa para no dejar de quemar suela. Prendas impermeables, capas que doblar hasta esas lluvias estivales de un rato,chaquetas Harrington, impecables gabardinas, camisas de cuadros, camisetas con detalles clásicos de la casa, botas Marsh de goma, parkas todoterreno, fulares y un buen arsenal de bolsas de equipaje para ir bien preparado para otro año de festivales, otro año de buena música por las venas.
Texto: Bru Romero
