Parece que con la llegada del buen tiempo llegan también las buenas noticias y es que si celebramos con alegría y tremendo alboroto la colaboración que Supreme se marca con Lacoste (y que estará a la venta el próximo 20 de abril), ahora nos marcamos una coreo frenético-festiva al enterarnos que Moschino será la nueva firma en añadirse al batallón de marcas invitadas a colaborar con H&M y con cuyas prendas empapelaremos, lo más seguro, nuestro armario empotrado el próximo 8 de noviembre.
Al igual que esperamos todos los años el anuncio de los carteles de los festivales por donde nos solemos dejar caer, la fecha exacta en la que podremos ejecutar nuestras vacaciones o la programación de la semana del Orgullo (semana o casi mes), también esperamos curiosos el comunicado de H&M en el que nombre a su siguiente marca con la que hermanarse. Este año parece que vuelve a dar en el blanco.
Y es que a firmas por todos conocidas (y deseadas) como Versace, Lanvin, Karl Lagerfeld, Viktor & Rolf, Alexander Wang o Kenzo se les une ahora Moschino, la firma de moda italiana nacida en 1983 que pintó de extravagancia y color los 90 y que gracias a su diseñador creativo, Jeremy Scott, sigue conservando aún en nuestros días ese rollo pop que tanto gusta de vez en cuando.
Una colección que a la espera de su previa presentación ya ha despertado la enfermiza necesidad de poseerla de quien sabe, por experiencia, que en pocas horas (si es que llega a la hora) se agotará y que en la madrugada del 7 al 8 de noviembre congregará a miles de parroquianos fashionistas a las puertas de las tiendas seleccionadas de la cadena sueca para hacerse con un pellizco de la llamada moda democrática, moda a precios asequibles.
Parkas con lentejuelas, piezas con estampados de CDs, prendas denim reconvertidas, chaquetas y chaquetones transformados en ropa de doble largo (camiseta de Hockey con cola) o cropped, accesorios a granel y mucho estilo desenfadado tanto para el día como para la noche son algunas de las pinceladas con las que Scott nos deja los dientes largos hasta la próxima conexión. ¿Podrás esperar?
Foto: Terry Richardson