Puede que en los últimos meses te veas menos atractivo, con la cara más apagada, el brillo de tus ojos a medio gas, un pelo totalmente revolucionado y un incipiente acné teenager que te visita y que se resiste a marchar. Con esta vida en blanco y negro, gracias a un confinamiento pop up que nos hace declinar cualquier plan que se aleje de nuestro barrio, hemos llegado a la conclusión que no tenemos la culpa, la nueva normalidad nos ha hecho así.

Y es que según un estudio de la Mental Health Foundation, 8 de cada 10 adultos han experimentado un aumento del estrés en el transcurso del último año, algo que en muchos casos ha derivado en casos graves de ansiedad y depresión sin contar con la debilidad de nuestra salud mental que este virus está poniendo en jaque. Pero no solo es el virus el malo de esta película sino el cortisol, la hormona esteroide directamente relacionada con el estrés.

«Niveles persistentemente altos de cortisol son malos tanto para la salud mental como la física, ya que neutraliza nuestro sistema inmune, lo cual afecta al estado de nuestra piel, pelo y uñas», explican desde el centro de tratamientos terapéuticos The Recovery Centre.

Una serie de informaciones que nos llevarían de la mano a través de esta aceptación de que lo que pasa ahí fuera está afectando a esa carita guapa que no la pintaban los pintores y que queremos tener de vuelta pese a la sequedad, dermatitis, arrugas, pérdida de la elasticidad o ese aspecto inflamado que estemos sufriendo.

Un síndrome de Dorian Gray, pese a llevar una vida espartana alejada de cualquier tipo de exceso, que solo conseguiremos revocar si comenzamos a relajarnos un poco más mientras reconectamos con nosotros mismos, descansamos las horas necesarias, nos alimentamos con una dieta equilibrada y manteniendo un mismo horario, hacemos ejercicio no de manera puntual sino contínua, nos despejamos paseando en la naturaleza (siempre que sea posible o nos ponemos en manos de especialistas si creemos que no podemos sobrellevarlo por nosotros mismos.

¿También quieres una rutina beauty con la que seguir agarrándote a esa guapura que no quieres que termine por desaparecer? Pues tira de retinol que mantendrá a esas arrugas y líneas de expresión a raya, de ácido salicílico para limpiar esos poros en profundidad y no pierdas la calma porque pronto saldremos de esta asquerosa pesadilla que nos ha puesto a prueba.