Cuando dos marcas se unen y consiguen que el experimento surta efecto es de obligada necesidad que se vuelvan a reunir para seguir experimentando y exprimiendo el máximo de sus capacidades y darle así a sus compradores lo que tanto esperan. Una aventura como la que dos firmas como Rick Owens y Birkenstock emprendieron hace unas cuantas temporadas y que ahora parece haberles reunido en una tercera colaboración tan esperada como la primera.
Una colección cápsula de sandalias con la que disfrutar aún más el verano que se abre ante nosotros y que para la ocasión se apuesta toda las fichas el negro como seña de identidad de las dos casas. Si las anteriores colecciones bebieron del espíritu de Rick Owens para esbozar una línea de siluetas reconocibles por los adeptos de la marca americana, para esta ocasión la rendición de Birkenstock es absoluta en negro, su color de la temporada.
Así, los modelos Boston, Arizona y Rotterdam de la alemana reflejan claramente el resultado de una simbiosis con la que suman y nadie pierde y donde la piel, la líneas rotundas y las potentes suelas conforman las sandalias que deberías lucir en tus próximas vacaciones si ya andas buscando el calzado idóneo que llevar. Unas sandalias donde el cuero ribeteado no se esconde y más cuando desde Owens informan que se inspiraron en el cine de Fritz Lang. Un guiño al que suman la piel metalizada e iridiscente de los modelos Boston y Arizona que, ya auguramos, se convertirán en el must de las próximas semanas. Sencillitas pero cargadas de simbolismo. No esperábamos menos.