Y lo hace casi coincidiendo con su aniversario, nada más y nada menos que 30 años.
Quién le iba a decir al atípico empresario Sergio Durany que casi tres décadas después de su primera tienda Natura, el negocio le seguiría yendo como un tiro. Un camino que ha ido haciendo pasito a pasito, sin dejarse llevar por la codicia. Una aventura empresarial financiada con recursos propios que le han permitido crear una red de 235 tiendas y llegar a unas ventas de 135 millones de euros.
Una empresa que desde 1994 nos ha surtido de velas, inciensos, mantas, ropa y demás accesorios al margen de tendencias sin ningún sentido, que no hacen otra cosa que obligarnos a comprar al tún tún, y que de la mano de Natura han resultado ser compras con más conciencia. La misma conciencia de Durany para pensar que no hay empresa, por mucho éxito que pueda llegar a amasar, que no se renueve y de ahí que inaugurando nueva tienda, estrena nuevo concepto.
Así, aquellos locales cuajados de vegetación (como si de una cueva se trataran) posiblemente se vayan transformando, en los próximos años, en tiendas cálidas, de tonos ocres y terracotas, como los del que acaba de inaugurar en L’illa Diagonal. Un lavado de imagen tras el que descubrimos al estudio Quintana Partners, de los interioristas Pol Castells y Benito Escat, que hacen de Natura el lugar perfecto para perderte mientras buscas el regalo idóneo para esa persona tan especial.
¡Por otros 30 años más!