Y todo por un episodio de la serie The Crowded Room en la que el actor, queriendo huir del encasillamiento, se arriesga con una escena homosexual. Excusa para que sus fans no hayan tardado en dar su opinión.
No sabemos si porque aún no se entiende la labor actoral o porque nos pone eso de convertirnos en haters y pretender hacernos virales en el camino, pero lo que le están haciendo al actor Tom Holland no tiene nombre. La culpa la tiene una escena de la serie de Apple TV+ The Crowded Room, en la que el bueno de Holland da vida a Danny Sullivan (inspirado en Billy Milligan, primer absuelto de un delito debido a un trastorno de identidad disociativo tras ser detenido por su implicación en un tiroteo en Nueva York en 1979), un personaje que le está reportando las mismas alegrías que alergias entre su hordas de seguidores.
Un thriller psicológico, en el que también nos encontramos con una brillante Amanda Seyfried, en cuyo último episodio emitido vemos como su personaje mantiene relaciones sexuales en los baños de un club y practica sexo oral bajo los efectos de las drogas. Algo impensable para los fieles seguidores del héroe Spiderman despertando una oleada homófoba de memes, tuits y de más respuestas en contra de la inapropiada secuencia.
Una situación incomprensible que ha puesto al actor de Lo imposible, que hace poco dejó las redes sociales para desintoxicarse socialmente en pro de su salud mental, en la picota, y aún sabiendo que antiguos Peter Parker como Maguire y Garfield también han interpretado roles homosexuales sin caérseles los anillos. Sin duda, una prueba más que para muchos heterosexuales las relaciones entre hombres (entre mujeres le da morbo) son algo asqueroso, carne de burla o descrédito de toda una carrera, de un talento que en Holland chorrea a mares, y que no es otra cosa la capacidad de saltar de un personaje a otro por exigencias del guion. ¿Algún problema con eso? ¡Bravo, Tom Holland! El riesgo te sienta muy bien.