No hay cuestión más preocupante para el hombre y que más ponga en jaque a su hombría que la disfunción eréctil en esos momentos en que necesitas estar a pleno rendimiento. Un problema que muchos pueden achacar a 1.001 motivos pero que según se ha descubierto tiene mucho que ver con la cantidad de vitamina D que ingerimos.

Y es que según un estudio realizado en Italia y dirigido por Alessandra Barassi, los riesgos de padecer disfunción eréctil tendrían que ver con los bajos niveles de vitamina D, es decir, la vitamina que encontramos en pescados como el salmón, la caballa o el atún en aceite, los cereales, el caviar (ya sea rojo o negro), el tofu y la leche de soja, las ostras, los huevos, las setas o el salami, la mortadela de Boloña o el jamón curado.

Aquellos que presentaban problemas de alcoba, también registraban en las analíticas un 24% menos de estos niveles de vitamina que aquellos que no presentaban ningún tipo de cortapisa a la hora de salir airosos de sus hazañas sexuales. Una insuficiencia que estimularía la producción iones superóxido, más conocidos como radicales libres, que agotaría el óxido nítrico en el organismo, acarreando un mal funcionamiento de los vasos sanguíneos. De este modo, los vasos no se relajarían, evitando el aumento del flujo de la sangre, lo que llevaría a que la erección no se produjera.

¿Qué hacer en estos casos? Pues no asustarse ni convertirse en el rey del drama, acudir a tu médico de cabecera para que nos examine y empezar a consumir alimentos ricos en vitamina D, anteriormente mencionados, o apostar por una suplementación de casi 30ml al día que nos permita equilibrar esos  niveles y volver a hacer de la cama, nuestra particular santuario sexual.

Posted by:Bru Romero

La vida es una obra de teatro que no permite ensayos. Por eso, canta, ríe, baila, llora y vive intensamente cada momento de tu vida, antes que el telón baje y la obra termine sin aplausos.