No hubo macho alfa como él (con perdón de Brando, Mitchum y, más recientemente, Jon Hamm) y es que a pesar de que sus películas puedan no ser recordadas por sus grandes interpretaciones (hay algunas como Defensa y Boogie Nights que se salvan del fuego), lo que no podemos negar a Burt Reynolds, fallecido el pasado jueves, es que su imagen de macho ibérico de pelo en pecho y bigote a lo estrella porno de los 70 dejaba a más de uno (y una) al borde del desenfreno más adolescente. Lo que permitía que, al menos, nos alegrara la vista su paso por Hollywood.
Un tipo nacido en Michigan que no triunfó en condiciones hasta que ya andaba en la cuarentena y que mientras tanto se encargó de exprimir su hombría y chulería como camarero, repartidor, portero de discoteca y estrella de la televisión donde conocería a su gran amigo Johnny Carson. Dio voz a esa liberación sexual de los 70, desnudándose para la revista Cosmopolitan en abril del 72, pero evitando que el público le tomara en serio como estrella de cine. Su fama como personaje popular creció, su posible (y segura) nominación al Oscar por Defensa de John Boorman se esfumó, la televisión le rescató en los 80 y Paul Thomas Anderson le volvió a sacar de su particular destierro a finales de los 90. ¿El último en contar con él? El maestro Tarantino que no sabemos si consiguió grabar con Reynolds las escenas de su última película (Once upon a time in Hollywood). Tendremos que esperar para darle el último homenaje. Mientras tanto, nos dejamos llevar por algunas de sus frases más memorables.
“Mis películas fueron las típicas que se ponían en prisiones y en aviones. Así nadie podía escaparse”.
“Pude haber ganado millones de dólares en demandas por los rumores que circularon sobre que tenía el SIDA en 1984. Sobreviví gracias a la filosofía de mi padre: «Me mearé sobre tu tumba».
“El matrimonio es el modo más caro en el que un hombre normal y corriente puede conseguir que le hagan la colada”.
“El mejor director que tuve fue John Boorman en Defensa. Cuando Boorman me dijo: ‘Deja de actuar. Solo sé tu mismo. Te esperaremos porque no podemos quitar la vista de ti’, lo que no sabía es que le había dicho lo mismo a mis compañeros Jon Voight y Ned Beatty”.
“Puedo cantar igual de bien que Fred Astaire puede actuar”
“He tenido que reinventarme cuatro o cinco veces. Ahora estoy trabajando en la reinvención más desafiante: sobrevivir”
“Siempre me he llevado bien con los tejanos. Tienes que hacerlo”.
“Prefiero recibir un disparo en la pierna que ver una película de Ingmar Bergman”.
