Se acerca el buen tiempo, el verano, la sangre que se altera y los chicos que se enamoran y nosotros no pensamos en otra cosa, además, que hacernos con un buen surtido de ropa molona, de esa que hace girar cuellos y con la que nos sentimos tan cómodos y guapetones que no queremos entrar en casa. Prada, que siempre está atenta a nuestras plegarias por muy pequeñas que sean, nos da de su caldo dos tazas y, atención, la posibilidad jugar con sus telas para que nos marquemos un outfit de lo más auténtico y personal.
Sí, lo que oyes. Si lo tuyo ha sido siempre el DIY (do it yourself) y no te gusta hacer lo que todos hacen, vestirse como todos, no hay mejor opción que la personalización que la firma Prada nos permite a la hora de elegir atuendo. Un servicio de customización con el que bucear por los archivos de la firma italiana y que nos supone un verdadero double trouble (problema doble) al tener que elegir de entre sus diferentes diseños, colores, estampados ya demasiado icónicos como para resistirse a ellos. Y doble puesto que esta opción permite crearnos camisas a partir de la combinación de dos tipos de telas.
Un match perfecto si tienes ojo y mejor criterio y que con la ayuda (y guapura) del modelo Roberto Sipos nos permite hacernos a la idea de las múltiples mezclas que podemos hacer para cada día de la semana o para esas fiestas en las que no queremos repetir de look y necesitamos de una idea como esta que nos engancha y saca a relucir nuestras buenas dotes como visionario de moda. Algo único y no tan repetible pero… ¡por tiempo limitado!