Juego de Tronos se coronó como la mejor serie dramática, Fleabag hacía lo propio en comedia y mientras Peter Dinklage volvía a recoger un nuevo Emmy por su trabajo como Tyrion, nuestro DEAR Billy Porter hacía lo propio bautizándose con el primero por Pose. También lo volvían a recoger RuPaul’s Drag Race, Patricia Arquette, pero esta vez por Act, Bradley Whitford como actor invitado en El Cuento de la Criada o Jason Bateman que se alzaba con el premio por su gran dirección (sí, también la dirige) en Ozark); pero, sin duda, de la gala de los premios la industria de la televisión americana nos quedamos con sus anécdotas y con los looks con los que muchos de los allí presentes nos entretuvieron hasta la madrugada.

Una gala sin presentador (seguimos con esta tendencia en alza pese a que Homer Simpson lo intentara en esta ocasión hasta que le cayó un piano encima) en la que una exultante Michelle Williams se alzaba con el Emmy a mejor actriz de una serie limitada por Fosse/Verdon y daba las gracias por la igualdad salarial que había conseguido con Fox; Sophie Turner y Kit Harrington (que se iba sin premio) se fundían en un abrazo que ni aquel de Juego de Tronos; el chupito que se metía Alex Borstein antes de subir al escenario para recoger su galardón a mejor actriz de reparto por The Marcelous Mrs. Maisel, momento en el que confirmó que a diferencia de la anterior edición en la que no llevaba sujetador, esta vez lo hacía sin nada de ropa interior; el traspiés de una embutida Kim Kardashian al presentar uno de los premios junto a su hermana Kendal; el adiós a Veep con una recuperada de su cáncer Julia Louis-Dreyfus; la resaca que el actor Ben Wishaw confirmaba al recoger su estatuilla por A very english scandal; los sentidos aplausos a Patricia Arquette y Peter Dinklage por sus discursos defendiendo la tolerancia y la diversidad o el diseño de Michael Kors que eligió Billy Porter para recoger su deseado Emmy, el primero para un actor negro abiertamente gay, triunfo para el sentir más LGTBQ.

Y es que si el estilismo de Billy Porter volvió las cabezas de más de uno, no se quedaron atrás Nikolaj Coster-Waldau, James Van Der Beek o Justin Hartley que, al menos, lo intentaron o Ben Whishaw, Kit Harington y Mahershala Ali que, en su sofisticada sobriedad, nos encantaron. Pero como dicen que mejor una imagen que un puñado de palabras, aquí nuestros favoritos…

Posted by:Bru Romero

La vida es una obra de teatro que no permite ensayos. Por eso, canta, ríe, baila, llora y vive intensamente cada momento de tu vida, antes que el telón baje y la obra termine sin aplausos.

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