Cannes 2019 echa el telón con la entrega de sus deseados premios y aunque muchos esperábamos que Almodóvar se trajera el suyo para Madrid (o para La Mancha), digamos que vuelve con el aplauso del público (que es, en realidad, el que cuenta). Una mueca en el historial de alegrías que ha reportado al director manchego su última película y cuya gloria, eso sí, se ha materializado en el premio a Antonio Banderas. ¡Ay, Antonio!

Y es que aunque ya los rumores (más madrugadores) apuntaban a Banderas como el elegido para recoger el testigo de Marcello Fonte, actor que ganó el galardón a mejor actor por Dogman, tuvimos que esperar unas cuantas horas más hasta que se hacía oficial. Un premio con el que el actor malagueño se resarcía de haber quedado a las puertas en la misma categoría por Todo sobre mi madre y Volver. Honores que suponían, siendo un poco enrevesados, una rendición ante el director manchego al saberse que el papel con el que Banderas gana no es otra cosa que el alter ego de Almodóvar en pantalla grande.

 

Una merecida distinción que se añade a la gran ovación que recibió el coreano Bong Joon-ho, director tras la película que se ha alzado con la Palma de Oro a mejor película, Parasite. Un drama familiar a medio camino entre la sátira social y el género de terror que empapándose de Chabrol y Clouzot nos regala una excéntrica cinta en el que gente rica y gente pobre cohabitan en un mundo que hace aguas.

Un carácter social que suma y sigue en la misma corriente al premiar, también, los trabajos de Emily Beecham por Little Joe (mejor actriz), los hermanos Dardenne por Young Ahmed (mejor dirección), Céline Sciamma por el guión de Portrait de la jeune fille en feu (Francia), Mati Diop por Atlantique (Senegal) que se hacía con el Gran Premio del Jurado o César Díaz que se alzaba con la Cámara de Oro por Nuestras madres (Guatemala) como mejor debutante. Premios muy bien repartidos y un giro de 180º que parece que el jurado del festival (con Alejandro González Iñárritu a la cabeza) da, a favor de las nuevas temáticas que mueven al respetable, en esta 72ª edición del Festival de Cannes.

Posted by:Bru Romero

La vida es una obra de teatro que no permite ensayos. Por eso, canta, ríe, baila, llora y vive intensamente cada momento de tu vida, antes que el telón baje y la obra termine sin aplausos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *